hace poco, caminando, pensé sobre mi vida.
si bien la mayor parte del tiempo me encuentro ocupado,
trabajando específicamente, casi nunca pienso en mi.
este año en especial, me ocupó en sobrevivir
más que en sentir y creo que es lo lógico, no está mal.
volviendo al pensamiento inicial, de pensar en mi (o el no pensar en mi),
no creo que tampoco esté del todo mal,
para ocuparse de necesidades menos importantes (o urgentes)
hay que primero saciar las más elementales
y en eso me enfoqué por 30 años
y la verdad no me arrepiento.
Si bien por momentos (...) me di ciertas libertades,
mi prioridad estos años fue mi trabajo
y me siento verdaderamente orgulloso de lo poco o mucho alcanzado
y no me arrepiento de los sacrificios que esto me ha significado.
Hay una parte en mi que si me reclama no haber pensado en mi antes,
no más, es decir no en una cuestión de cantidad, si no de calidad.
Quizá tampoco tenía la capacidad de pensar en mi, como la tengo hoy
que un poco más viejo y más sensato por el devenir de la vida
puedo plantearme preguntas más simples y a la vez más significativas.
si bien la mayor parte del tiempo me encuentro ocupado,
trabajando específicamente, casi nunca pienso en mi.
este año en especial, me ocupó en sobrevivir
más que en sentir y creo que es lo lógico, no está mal.
volviendo al pensamiento inicial, de pensar en mi (o el no pensar en mi),
no creo que tampoco esté del todo mal,
para ocuparse de necesidades menos importantes (o urgentes)
hay que primero saciar las más elementales
y en eso me enfoqué por 30 años
y la verdad no me arrepiento.
Si bien por momentos (...) me di ciertas libertades,
mi prioridad estos años fue mi trabajo
y me siento verdaderamente orgulloso de lo poco o mucho alcanzado
y no me arrepiento de los sacrificios que esto me ha significado.
Hay una parte en mi que si me reclama no haber pensado en mi antes,
no más, es decir no en una cuestión de cantidad, si no de calidad.
Quizá tampoco tenía la capacidad de pensar en mi, como la tengo hoy
que un poco más viejo y más sensato por el devenir de la vida
puedo plantearme preguntas más simples y a la vez más significativas.
Pensé en qué pasaría si en mi vida tuviera a "la persona ideal",
sería feliz? habría logrado el éxito? podría morir en paz(jaja)?
y me di cuenta que esa pregunta me era irrelevante,
pues no es lo que creo necesitar y buscar en mi vida.
Hay un estándar a buscar la felicidad como meta única
y que todo lo que hagamos debe alinearse a ese fin.
No estoy de acuerdo.
Si bien es una meta valida (el ser feliz),
debería ser una opción consciente
y no un mantra obligado: ser feliz.
Acepto que si deseo ser feliz, pero no considero eso mi meta.
Me planteé más preguntas insignificantes
y continué caminando.
En el devenir de esas preguntas me di cuenta
que no había pensado antes tanto en esa cuestión
y a eso viene este texto, a ser una memoria (de ese instante de sensatez).
pues de la nada me di cuenta de lo que considero mi objetivo en lo que
me resta por vivir: tratar de sentirme completo.
Me replanteé varios escenarios:
si estar enamorado me haría estar completo, y creo que no.
si tener mucho dinero me haría estar completo y pues no.
si ser reconocido por muchas personas me haría estar saciado y no.
y me di cuenta que lo que necesito es completar ciertas partes de mi mismo:
completar mi proceso de maduración emocional,
de completar mi liberación hacía el expresar mis emociones
sin temores y con responsabilidad.
De no relegar mi parte académica a un interés económico.
De liberar mi creatividad y talento.
Pero especialmente es por el lado emocional donde vi que aun me queda un tramo por caminar, seguro he de fracasar muchas veces en ese camino,
pero lo veo ahora con mas claridad, es el camino de mi aceptación.
Encaminado hacia mi meta: ser yo completamente,
creo podré vivir consciente de que estoy buscando lograr mi propio objetivo.
Si en ese camino he de encontrar otros destinos,
estos tienen que estar en sincronía con lo antes planteado
y no al revés.
Trujillo 17/12/2020
